viernes, 24 de agosto de 2012

El buen idiota



Un buen idiota es aquel que tiene grandes ideas pero no sabe cómo hacerlas realidad. Pero el típico idiota que se hace el bueno tiene siempre una gran solución a la mano: cargarle la cuenta al Estado. Ellos son los que van haciendo propuestas alegremente, sugiriendo apoyos a medio mundo, siempre a costa del Estado. Es lo que acaba de hacer Augusto Álvarez Rodrich a nivel nacional sugiriendo que el Estado apoye o financie al cine peruano y la ley obligue a los cines a tener las películas peruanas en exhibición por lo menos dos semanas. 

Claro, como AAR no es propietario de un cine y no le afectará a su bolsillo tener dos semanas de salas vacías, él puede alegremente lanzar esa propuesta tan bella de apoyo al cine nacional y quedar como un buen tipo, como un patriota y hasta, para muchos, como un tipo inteligente. Es así como misteriosamente el ser humano ha confundido siempre la estupidez con la inteligencia. Por eso tenemos 25 teorías de la inteligencia y ninguna de la estupidez.

Este buen idiota nos dice que la gente no va a ver las películas peruanas porque no tienen publicidad. Tonto argumento, cuando toda la semana le están haciendo publicidad gratuita a la película "Cielo oscuro", donde actúan los "brillantes actores de cine" Lucho Cáceres y Mariela Zaneti, y donde se muestran los grandiosos escenarios de Gamarra y las calles de La Victoria, mientras los personajes del drama erótico almuerzan en una carretilla antes de irse a tirar al auto. ¿En serio creen que la gente está ansiosa de ver eso? Ya pues...

Una vez más otro buen idiota queda como un personaje correcto ante las cámaras, fomentando el estatismo popular, patética mentalidad que ha corroído a la sociedad peruana llevándola a la mediocridad. Hoy se pide, una vez más, que el Estado financie los mamarrachos fílmicos y los caprichos artísticos de un grupito selecto de afortunados que podrán acceder al dinero público para realizar sus sueños, gracias a que nos han convencido de que eso es arte y cultura, y que favorece la integración nacional. Palabrería sutil con que se redactan las leyes estatistas y asistencialistas que promueven y financian la mediocridad.

Claro que siempre nos enrostran los malos ejemplos del extranjero. "¡Otros países también lo hacen!", nos dicen. No lo dudo. Idiotas hay en todos lados.  Es por eso que entran en crisis, como España, que es el ejemplo clásico. Lo que no se dice nunca es que la calidad y el arte verdadero nunca han necesitado subvención alguna. Solo la mediocridad lo requiere. Ya he dicho bastante sobre la ley del cine en otro artículo  y no voy a repetir más lo que ya dije. Me remito a él.

También ya he dicho lo nefasto que resulta el asistencialismo estatal en todo sentido. Véase el artículo correspondiente "¿Por qué los programas sociales son malos?". El asistencialismo estatista solo fomenta corrupción y mediocridad. Ya es tiempo de empezar a cambiar la mentalidad de la gente. No podemos seguir alentando esa nefasta costumbre de esperar que el Estado lo haga todo. El Estado solo tiene que ocuparse de pocas cosas como proteger a los ciudadanos, cuidar nuestras fronteras, representar a la nación en el mundo, etc. No tiene que meterse en las ocupaciones de la gente.

El Estado no tiene que financiar cosas que la gente debería hacer por sí mismas, que la sociedad debería poder hacer organizándose, sobre todo si es un negocio, como lo es el cine. Todo el problema radica en los buenos idiotas. En esos que quieren dar la imagen de corrección y de patriotismo, de sensibilidad social y altruismo, pero todo con plata del Estado. Así tenemos una larga fila de idiotas con sus proyectos sociales como los que quieren pagarles el regreso a los peruanos del extranjero, o los que quieren darles un "bono del chatarreo" a los transportistas más conchudos e irresponsables, y otra perlas por el estilo. 

Parece que nadie se da cuenta de que todas esas barbaridades al final salen de nuestro bolsillo. Pagamos un escandaloso 18% de IGV cuando deberíamos estar pagando 10% como máximo. Encima muchas veces se suman otros impuestos como el selectivo. Por cada diez soles de gasolina pagamos 8 de impuestos. Ahora quieren cargarnos un impuesto a las entradas del cine para financiar la mediocridad nacional. La mayor parte de nuestros impuestos termina financiando la enorme burocracia y las estupideces que fomentan los buenos idiotas. 

Ojalá podamos lograr un cambio de mentalidad en los peruanos y exigir que se eliminen la tonterías y que se reduzcan los impuestos. Que el Estado se dedique a hacer bien lo poco que realmente le compete, como la seguridad ciudadana y la educación, por ejemplo. Como diría el Mago Markarián: podridos nos tienen los buenos idiotas y sus grandes ideas.


Dante Bobadilla Ramírez

6 comentarios:

  1. muy cierto doc.como se le ocurre a este cojudo que me voy atomar el tiempo de solamente pensar,el remotisimo caso,de algo totalmente impensable que jamas pasara,de ir a ver una pelicula peruana...seria mas idiota que el,salir de ver una pelicula peruana es lo mas ridiculo soporifero y decepcionante que pueda haber...no jodas madeinusa...puaaajjj

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  2. muy cargada de ira tu critica ¡¡¡

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  3. perdi mi dinero leyendo tu escrito

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  4. Felicitaciones a Dante por continuar con su blog, a pesar que el establishment caviar lo obligó a zafarse de ese lupanar caviar que es lamula.

    Qué se puede esperar de AAR, un tipo que siempre quiere estar bien y quedar bien, por eso en la época del gobierno de fujimori servia al gobierno, y en la época de los caviares es adalid de las causas políticamente correctas, por eso le dicen el fujicaviar.

    Estos son los que Gonzales Prada llamaba los tibios, que en realidad son los camarones que estan a la expectativa de caer en una buena corriente, siempre muy cómodos y acomedidos. Una pérdida de tiempo leerlo o sintonizarlo. Mediocre!

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  5. Excelente artículo. Seguro AAR quiere algunos millones de nuestros bolsillos para hacer otra pelicula más de un delincuente como Yango, y luego van a hacerle un monumento a cualquier otro secuestrador más, jefe de banda o barra brava, narco o sicario, y todavía piden para sus homenajes que les den la plata de los impuestos que la gente se gana trabajando honestamente.

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  6. Seguro pide que en vez de usar el dinero de las contribuyentes en libros para los niños pobres, se les de millones a ese grupito privilegiado que tiene secuestrado el cine nacional para inmortalizar las andanzas de algun otro criminal "durante sus años de gloria", tal como dice el tralier de Django):
    http://www.youtube.com/watch?v=zueGqqH98BI

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